«La vida está llena de momentos en los que es necesario reír sin motivo, como un estornudo……»
Así se disculpa Gabriele (Marcello Mastroianni) delante de Antonnietta (Sofia Loren) cuando la conoce por primera vez en Una jornada particular (Ettore Scola, 1977), cuando, nervioso por cierta excitación, no puede reprimir una carcajada.
El film, situado en Roma, no nos propone ningún viaje. Roma casi ni se ve, sólo a través de antiguas películas que documentan la visita de Hitler a la capital italiana de Moussolini que tiene lugar aquel día (8 de mayo de 1938), como gran acontecimiento de una Italia bajo el fascio. Un acontecimiento que, a lo largo de todo el film, sirve de banda sonora: de principio a fin, una voz a lo «nodo» de la radio narra, con todo lujo de detalles, el desfile militar y el encuentro entre los dos dictadores…
Pero el film no se aprovecha de lucir Roma en ningún momento. Sólo nos muestra algunos patios desde la azotea, o un patio interior por el que se accede a las viviendas. Y dos apartamentos.
Es un film intimista que se centra en la relación que se establece durante todo un día entre dos personajes. Una ama de casa, un locutor de radio en paro, en un bloque de pisos….encerrados como pájaros en una jaula (sus apartamentos, sus vidas), oprimidos, vacíos…..Antonietta, madre de seis hijos con un marido fascista, déspota, irritable, que la infravalora y la desprecia por analfabeta….Gabriele, un locutor de radio en paro, por sus ideas políticas, por…..criticado por una portera bigotuda.
Y se encuentran, y se entretienen, y pasan el tiempo juntos, tiempo de calidad, descubriendo que juntos ya no están solos como en sus mundos….. dos almas solitarias que se escuchan, se comprenden, se acompañan…. que se ilusionan el uno con el otro, que encuentran en el otro la ternura y la comprensión que su mundo les niega…
Una ama de casa, un locutor de radio en paro…y una historia intimista, intensa, tierna, desgarradora…..y con sorpresa, varias sorpresas…..y por encima de todo, un tono sorprendentemente progresista, osado, avanzado, inteligente….una delicia….
Roma de los eternos espacios abiertos, hedonista, lujuriosa, evocadora de mil historias felices….
pero la realidad nada tiene que ver con la idea que desde fuera se tiene de un lugar, de cualquier lugar. Hay miserias y alegrías, amargura y felicidad, habitantes de todo tipo que ni de lejos viven la ciudad de ensueño que buscan los turistas.
feliz día L.L.
Gracias Placido!!!!
completamente de acuerdo,Roma, luminosa, victoriosa, maravillosa, exquisita…que recuerdos me traen…pero a pesar de esta fachada, en el interior, hay almas que sufren….verdaderamente me cautivó el contraste y la intensa historia en un sólo dia….y me fascinó Mastroianni….